Ejecutivos de OpenAI y Microsoft estarían considerando la "opción nuclear"

OpenAI y Microsoft suelen presentarse como la pareja dominante de Silicon Valley, pero a puerta cerrada, cada vez más se asemejan a un matrimonio desastroso y sin amor. Ambas compañías, unidas por flujos de caja y una base de productos entrelazada, han estado atravesando una turbulenta negociación en torno al deseo de OpenAI de tener menos margen de maniobra y la oportunidad de convertirse en una empresa con fines de lucro. Microsoft parece resistirse a algunos de estos objetivos. Ahora, un nuevo informe afirma que el personal de OpenAI ha preparado una "opción nuclear" en caso de que las negociaciones no prosperen.

El Wall Street Journal informa que OpenAI podría recurrir al gobierno federal y acusar a Microsoft —su propio padrino— de prácticas anticompetitivas. De ocurrir esto, los ejecutivos de OpenAI afirman que solicitarían una revisión regulatoria federal de los términos del contrato entre ellos y Microsoft, con el fin de identificar posibles violaciones antimonopolio. Para Microsoft, recurrir a la policía antimonopolio podría ser la forma más extrema de traición que existe. Ya ha recorrido ese camino , se ha recuperado y se ha convertido en una empresa muy diferente. OpenAI también podría lanzar una campaña mediática para airear los trapos sucios del dúo en público.

Las dos empresas tienen una relación bastante singular que podría hacer que un conflicto de este tipo sea particularmente desastroso. Microsoft no posee la propiedad absoluta de OpenAI, y la startup no está técnicamente en deuda con el gigante del software. Sin embargo, Microsoft proporciona la infraestructura de computación en la nube necesaria para impulsar las herramientas de OpenAI, y Microsoft obtiene un gran porcentaje de las ganancias de OpenAI hasta que la startup reembolse su inversión inicial. Una vez pagada la inversión inicial, Microsoft conservará una participación significativa en la empresa y obtendrá un cierto porcentaje de las ganancias de OpenAI hasta que alcance su límite. Sin embargo, como técnicamente no es propiedad de Microsoft, OpenAI sigue siendo (técnicamente) una organización independiente.

El esfuerzo de OpenAI por convertirse en una empresa con fines de lucro es presumiblemente fundamental para su estrategia de crecimiento a largo plazo, una estrategia que podría verse frustrada si Microsoft la controla con demasiada fuerza. El Journal señala que gran parte del conflicto entre ambas empresas parece girar en torno a la continuidad de la propiedad de Microsoft sobre gran parte del negocio de OpenAI:

Las empresas siguen discrepando sobre la proporción de OpenAI que Microsoft poseería si se convierte en una corporación de beneficio público. Microsoft solicita actualmente una participación mayor en la nueva empresa de la que OpenAI está dispuesta a otorgar, según fuentes familiarizadas con el asunto. OpenAI debe completar la conversión antes de fin de año o corre el riesgo de perder 20 000 millones de dólares en financiación.

Si OpenAI se volviera en contra de Microsoft, la batalla corporativa resultante podría ser histórica: una pelea brutal entre dos de las empresas más influyentes de Silicon Valley. Sin embargo, no está claro si ya hemos llegado a esa etapa. "Tenemos una colaboración productiva y a largo plazo que ha proporcionado herramientas de IA increíbles para todos", declararon representantes de ambas empresas al Wall Street Journal en un comunicado conjunto. "Las conversaciones continúan y somos optimistas de que seguiremos construyendo juntos durante los próximos años". Gizmodo contactó a OpenAI y Microsoft para obtener más información.